La Real Archicofradía de María Santísima del
Carmen, ha trasladado a la Patrona de Rute, de manera extraordinaria
desde su santuario a la parroquia de Santa Catalina Mártir. Traslado
que se ha realizado con la máxima discreción y a las cuatro de la
madrugada de este sábado, como medida de seguridad ante la pandemia
y por tanto para evitar cualquier tipo de masificación de fieles, ha
explicado la presidenta de la cofradía, Ana Burguillos. La Patrona
de Rute ha sido trasladada sobre unas andas portadas por seis
hermanos de varal, con la presencia de miembros de la junta de
gobierno y del consiliario de la hermandad, el párroco José
Gregorio Martínez Osorio. Se ha realizado en Santo Rosario y ha
discurrido por las calles Toledo y Constitución que separan la
ermita de la Virgen del Carmen y la parroquia de Santa Catalina.
Este traslado extraordinario sustituye al
tradicional que se realiza dentro del programa de las Fiestas
Patronales coincidiendo con el último domingo del mes de julio. Como
ha explicado la presidenta de la cofradía, Ana Burguillos, ante la
pandemia, la hermandad ha decidido suspender este tipo de procesiones
multitudinarias y este año solo celebrar cultos religiosos dedicados
a la Patrona. Ante el inminente triduo de la onomástica de la Virgen
del Carmen, del 14 al 16 de julio que siempre se realiza en su
Santuario, la cofradía ha decidido trasladar la sagrada imagen a la
parroquia de Santa Catalina que cuenta con un mayor aforo de fieles.
Medidas históricas, ha reconocido el consiliario de cofradía que
van a coincidir con el inicio de las comuniones que por culpa de la
pandemia también se han visto modificadas. A las nueve de la mañana,
el disparo de cohetes anunciaba a los ruteños que la Patrona se
encontraba presidiendo el altar mayor de Santa Catalina Mártir,
parroquia que desde esa hora abría sus puertas a los fieles que han
ido pasando a lo largo de una jornada histórica.