La borrasca atlántica Emma ha cambiado
el paisaje de la Subbética, transformando
los enclaves donde el agua juega un papel protagonista. Parajes como la
nava y las Chorreras de Cabra, el río bailón en Zuheros o la garganta de La Hoz
en Rute han recuperado toda su belleza gracias a las lluvias caídas durante la
última semana. Han sido precipitaciones generosas que en Rute han alcanzado,
desde el pasado domingo 25 de febrero, 75,1 litros por metro cuadrado según los
datos de la estación de AEMET en esta localidad, o los 86,8 litros de la
estación homóloga en Cabra.
Cantidad de agua que ha convertido en
una laguna el polje o nava de la sierra de Cabra, donde también se encuentran
varias cascadas como las Choreras. Desde aquí, el río Bailón, con abundante
caudal ha dado vistosidad a todo su sendero y en especial el cañón, donde forma
grandes cascadas, junto a la villa de Zuheros. También la garganta del río La
Hoz, en Rute, es otro paraje donde las cascadas, algunas de más de 30 metros,
han recobrado toda su belleza con el agua.
El parque natural de las Sierras
Subbéticas, declaradas geoparque, y por la naturaleza caliza de su geografía,
actúan como una auténtica esponja con las precipitaciones, por lo que precisan
abundantes lluvias para que los citados parajes recobren toda su singularidad.
A pesar del mal tiempo, muchos senderistas han acudido a los parajes citados
para disfrutar del espectáculo.